Por fin, el oral de Alemán, no salió tan bien como esperaba, vuelvo a repetir que trabajo en grupo se llama así por su nombre, y que si uno se hunde, los demás también, o remamos todos o el barco no avanza. Bueno, pero al menos lo terminé, sólo me queda el examen del lunes.
Ayer llovió de lado, muy típico en Cádiz, así que estuve hasta el último momento dudando entre ir a Teatro o no, ya que como una sola clase a la semana me parece poco he decidido ir también las tardes de los jueves que pueda. Escampó un poco y esa era mi oportunidad.
Unas dos horas, esa clase fue más corta de lo normal, vinieron gente nueva y realizamos más juegos que improvisaciones teatrales, me lo pasé bien, la verdad, y tenía tarea para el día siguiente; un papel con las cosas que me gustaría cambiar del grupo de teatro.
Volví, merienda y cena con Marta, llamadas de teléfono que te alegran el día, personas desagradecidas que sólo merecen ser mencionadas en esta frase, guitarra, sesión de fotos bastante íntegra, primera cita entre Tuv y Gloria y juegos de números.
Luego vino Manu, y empezaron a beber, es raro estar con gente y ser yo el único que no bebe pero ayer ocurrió, y bastante, el cola cao y la leche fueron los protagonistas de ayer, creo que había más fuera que dentro del vaso. Lo que ocurrió ayer lo puedo utilizar en contra de ellos en cualquier momento, así que mejor hacemos parkour.
Me obligaron a ver New Girl a las 3.30 de la madrugaba cuando me levantaba a las 9, así que imaginad como estaban, creo que vamos a tener que limpiar con oro la escalera para que la vecina de abajo no nos diga nada, pero bueno, menos mal que vivimos solos, o no, espera... me liao. Sólo aguanté el primer capítulo, y creo que se me iba a salir la caja torácica de lo que me estaba riendo.
Ahora en serio, me fui a dormir que el cuerpo me lo pedía, mañana promete.
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