Dos días teatrales, no recuerdo mucho más del piso que estar solo y leer algún que otro texto, estar desconectado de las absurdas conversaciones de Whatsapp además de alguna que otra chorrada variada y muchas faltas de ortografía, basura reciclable lo llamo yo.
Han sido dos días de Teatro bastante productivas; he presenciado la mística cueva de Platón, he bailado como los aquellos del Medievo, he cambiado la cara 3 veces por segundo, he podido desahogarme de aquellos que no soporto, he sido cómplice de una terrorista, concursante de gran hermano, policía, niño repelente y hipster aeronáutico del barrio de Salamanca, además de reírme y pasármelo como un auténtico crío, creo que me estoy encariñando con el/los grupo/s.
¿Algo más interesante? Volví a ver a la caótica de Pau, que almorzó en el piso y se fue minutos antes de que yo también saliese por la puerta en búsqueda de un vehículo grande y verde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario